Cafetería Play And Coffee

Tienen un parque de bolas con un monitor. por 4 euros tienes aperitivos y un juego de una hora, si no puedes comerte te dan 1,5 por media hora. ideal para el desayuno o el aperitivo y celebrar cumpleaños. ideal para estar con amigos con niños y disfrutar del tiempo para hablar. también celebran cumpleaños.

Lo positivo: la deliciosa bolleria. los roscones de reyes increíbles. todo hecho en casa y con un montón de tés, chocolates y bebidas lácteas. el parque de baile, ideal para niños más pequeños. el negativo: antes con el aperitivo, los niños tenían una hora libre en el parque. Y lo menos que salgo de todo, es que cada vez que vas, te cobran un precio diferente por lo mismo que siempre se ha pedido. Nunca lo entenderé. esto ha re-estado muchos puntos cuando se trata de ir, porque se me ha ocurrido varias veces. Pero para todo lo demás, genial.

No es el típico enorme y muy ruidoso parque de bolas. los empleados amistosos, los precios y la comida. Lo único que no me da es que si no tomas un menú para niños en lugar de un pequeño don de donuts, tomas un subo de tamaño normal) no te hagas más caro y no tienes el tiempo libre en el parque. un niño de seis años no merece un donout en el tamaño de un donut.

El sitio es maravilloso! el área de los niños tiene todo (pantallas, juegos de juegos, bolas, tablero, mesa y salón de baile), con monitores en horas pico. la comida es muy rica, la atención inmejorable, buena música al buen volumen... al final, ideal con o sin niños. 10000% recomendado

Recientemente la dirección del centro se ha puesto en contacto con nosotros para darnos las gracias por las observaciones y así poder mejorar la seguridad del local. Un punto positivo a su favor. Hemos vuelto y ha cambiado mucho, recomendable. De hecho, celebraremos allí un cumpleaños. Nota anterior: Teniendo en cuenta que tiene una zona infantil y que es un espacio dedicado a los más pequeños, he de decir que tiene pésimas condiciones de seguridad: en primer lugar una puerta que da acceso a unas escaleras sin ninguna protección, de hecho mi hijo de dos años casi se cae por las mismas en la primera visita (esto sucede porque cuando hay mucha afluencia de gente se suele quedar abierta); en segundo lugar, las mesas tienen un canto muy peligroso (en la segunda visita mi hijo se dio un golpe en el ojo, con herida incluida y el susto consiguiente), y en este caso había dos personas del SUMMA en la cafetería y ninguna de ellas se dignó en atendernos; y, por último, aunque haya un monitor en la zona infantil no está atento a los niños y niñas que hay allí, porque entran y salen continuamente de este lugar, con el peligro que eso conlleva. En definitiva, espero que mejoren las condiciones de seguridad para los peques porque va a haber más de un disgusto. De momento, nosotros hemos decidido no volver, por la peligrosidad para niños de 2 años y por la nula atención que tienen los propietarios cuando se produce un percance.