Reserveer nu
Feedback
Feedback gevenLa comida normal de un sitio batallero,pero el tema de limpieza muy mal,los cubiertos con restos de comida,pedimos que los cambien y los cambian pero no muy amablemente,los vasos igual,con restos de comida,no lo recomiendo
Restaurante situado en el polígono donde en la planta baja te comes unos bocadillos y unas tapas buenísimos magníficamente atendidos por el único camarero, creo que Eduardo, que no es normal la labor que desempeña él solo con los cafés, comidas, etc.. todo un crack. Y si queréis comer calidad y cantidad, arriba comimos menú 16 euros p.p. , fabada y lacón con espárragos de primero.. de categoría.. y cachopo y bacalao vizcaina, de segundo, mejor.. de postre cuajada, tu tinto, casera, y café... NO VA MAS.
El restaurante La Encina es uno de esos sitios donde puedes comer de una forma casera, con calidad, limpieza, buena atención y buen precio. Realmente es muy recomendable. La parte baja es el bar y en la segunda planta está el restaurante. Con una decoración modesta, amplio, ventilado, sin malos olores, cómodo, limpio y con un menú muy bueno... eso, sin mencionar a los postres caseros que son maravillosos, al menos los que tuve la ocasión de probar: natillas y flan. Rocío, una chica muy amable y agradable, forma parte del personal de ese restaurante, donde se puede comer con calidad y comodidad, ya que no es uno de esos sitios con las mesas están pegadas unas a otras, donde no puedes ni hablar. Estoy seguro que si vuelvo a Madrid, volveré a comer en este lugar. Además la atención de su gente es muy buena, factor fundamental en cualquier empresa que quiera dar un buen servicio, como el que dan en el Restaurante “La Encina”
Se come un menú muy variado, rico y te atienden rápidamente. Suelen tener postres caseros y un café más que aceptable. La barra también tiene buenos bocadillos y está abierto desde muy pronto. He probado varios de la zona y me quedo con este. Recomendable.
Fuimos a comer con la familia. Buena atencion, comida casera muy rica con menus muy variados. Seguro que repetiremos.