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Feedback gevenRecalamos una vez más por la Guacamaya Arepera, que esta vez nos recibió con ambiente de fiesta, pues era su aniversario. Una venezonalísima cena con Tostones con top de queso blanco fresco de la zona y ensalada Coleslaw; deliciosos Tequeños de queso blanco con un surtido de salsas para embeberlos: Melao de caña, tártara de cilantro, picante de ajíes, agridulce de mango y eneldo, entre otras. También unos platanitos bien maduros al horno con queso Llanero, para endulzar la cosa y algunas arepitas saborizadas...Para el plato principal pudimos disfrutar de lo más típico de la navidad venezolana: La Hallaca, una especie de tamal de harina de maíz coloreada con aceite de onoto, envuelto en hoja de plátano ahumada, rellena con guisados de diversas carnes, alcaparras, aceitunas y algunas pasas de uva, cebollas y morrones frescos. Todo acompañado con ensaladita rusa y mix de repollos salteados al wok en aceite de coco venezolano, con cúrcuma y coco rallado, que nos contaron, aprendieron a hacer en su último viaje por las costas de Venezuela.La cerveza artesanal "Momentos", la única elaborada en El Dique (el barrio de la Guacamaya) refrescó buenamente nuestros paladares durante la cena.Claro que la variedad culinaria, se debió al festejo y en lo habitual es más acotada, pero nos permitió probar una cocina de buena factura y autenticamente caribeña. Como la dueña es también DJ, el ambiente siempre cuenta con ese plus, que es gratificante tanto para nosotros, los músicos, como para el comensal promedio.Para el postre nos sorprendieron con un exótico Quesillo de Jojoto (especie de flan de choclo) una rareza culinaria de Venezuela hecha con mucho amor.Esta vez, la música en vivo y desde las bandejas, el baile y la fiesta colorearon la madrugada. Mi trago caribeño preferido de casi toda la noche, fue el maracuyá con ron dorado.
Un lindo lugar, bastante alejado del centro. Pero vale la pena conocerlo, la comida es muy rica y la atención es muy buena. Recomendable. Tiene ricos tragos.
Encantada con el lugar, la comida y su atencion, hermoso lugar para relajar con ricos tragos tambien
Fue todo un agrado. Sus dueños fueron muy amables y nos explicaron todos los platos, su origen y los ingredientes que no conocíamos. Volvería siempre que pueda. Además barato y abierto a toda hora.
Un lugar con calidez humana, muy buena onda, y comida exquisita.Las arepas son deliciosas, con el quesito muy similar al original caribeño que se sirve en Venezuela y Colombia y las entradas con patacones son un espectáculo!Se pueden acompañar con jugos naturales de Tamarindo, Maracuyá o limonada fresca.La mejor arepera de la ciudad de La Plata, volveríamos mil veces!!!