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Feedback gevenSerá mejor que no pienses. tienes que ir y vivir la experiencia, sin ideas preconcebidas. Sólo tienes que dejarte llevar.
Bueno, qué decir de este lugar, de la anfitriona, de la comida... Cualquier cosa se me antoja escasa. La mejor experiencia gastronómica que hasta la fecha he podido disfrutar. No es solo el cariño a la cocina y al producto, se refleja en el sabor y calidad, sino es la sensación de ir a visitar a un familiar y que te dispense la confortabilidad de un hogar. Todo muy cuidado, un ambiente cálido y mágico se podría decir. La experiencia no es solo al paladar, es desde que llamas a la puerta de la casa, porque es una casa y no un restaurante al uso,hasta que te marchas de allí con la pena de no seguir conversando con Olga. Vamos a volver, no dudo, y será una vivencia totalmente distinta, y ahí radica la excelencia.
Entrañable lugar. Estuvimos muy agusto en un precioso salón. Comimos una ensalada de pimientos con venteesca y kiwi , espectacular, despues un guiso de cordero con setas, y de postre la mejor torrija que he comido en mi vida. A destacar el exquisito trato de Olga, su dueña que nos explicó cada plato y nos hizo sentir como en nuestra propia casa. Recoemdable 100x100.
Un magnífico descubrimiento. Lugar decorado con gran gusto y encanto acordé con el entorno rural al que pertenece. Olga te cocina bajo pedido unos excelentes platos. Gran calidad y calidez. Precios acorde a lo que se recibe. Una experiencia genial.
Toda una experiencia. Comida muy rica y muy bien presentada. Olga pone todo para que disfrutes de la experiencia de comer en su propia casa, en un salón muy bonito y acogedor. No es un restaurante, cocina bajo demanda y tienes que encargar lo que vas a comer cuando reservas. Por supuesto que volveremos y que lo recomendaremos