Giuseppis - Altiplano

Pedí un pannini y me lo dieron con un pan de hamburguesa y la carne parecía plástico ,servicio lento ,la pasta estaba dura ,el pan de entrada ni siquiera lo dan caliente

Soy fan de la cadena de restaurantes de Giuseppis, por lo regular son lugares limpios, serios y simples, por eso es que me gustan. Me gustan los lugares simples, elegantes y serios. Por lo regular el diseño es de la misma forma. Es el tipo de diseño que busco. Entre más simple sean las cosas significa que más cómodo me voy a sentir. Lamentablemente esta versión para estudiantes no me gusta. No te recomiendo comer en esta sucursal. Lo único que de los restaurantes Giuseppis es el nombre. Tienen que mejorar la comida. No es la misma que en otras sucursales. Del servicio ni hablamos, ni un buenos días pudieron decirme, Es una pena. Otra cosa a mejorar es la limpieza y el orden. Si no dijera Giuseppis no reconocería el lugar, parecería otro tipo de lugar. Te recomiendo ir directamente a un restaurante de la cadena, no a este versión rápida.

Este lugar fue mi salvación durante la carrera porque tenía la lasaña más deliciosa del ejido. Era posible comer por 60 pesos un plato de sopa o ensalada, con lasaña y pasta. Los calzone son realmente deliciosos y enormes si lo que traes es un hambre feroz(como aquellas que te agarran a media clase y lo que quieres es comerte al compañero de enfrente). Te recomiendo ir con un grupo de 3 amigos para que puedan pedir la pizza entera de peperoni. La preparan al momento y sale calientita del horno solo para ustedes. En otro caso tendrías que comer una pobre y triste rebanada recalentada de pizza. Cuando me gradué el tamaño de Guissepis era el doble de grande. Hace algunos días que regresé, me di cuenta que ya esta a la mitad. Mi postre siempre era un cono de nieve Trifty que venden ahí. Era como un oasis en el desierto esa nieve ahí.

Cuando visité la cafetería de la UABC por primera vez, el único nombre que reconocí fue éste porque, para quien no la conoce aún, la cafetería es un tipo de food court de centro comercial en donde tienes diversas opciones. Cuando quiero desayunar me voy derechito al Giuseppis. Es el primero de la izquierda si estás viendo los locales de frente, tienen un mostrador pequeño donde están las rebanadas de pizza y los paninis y junto a eso está la comida preparada que puedes ver a través de un cristal conforme vas pasando con tu charola. Cuando voy pido un omelette, los preparan de rajas, de jamón, de chorizo y otras cosas y te los sirven bañados en salsa de tomate acompañados de una porción de frijoles refritos y unas papitas en cuadros a la crema de las que me podría comer el plato entero. También tienen otras opciones para la comida y la cena como pechugas rellenas, lasagna y pescado empanizado. Siempre están muy ocupados sacando comida recién hecha por lo que todo está muy fresco cuando te lo sirven. Si se te antojó el desayuno solo llega temprano porque a veces he ido como a las 10:30 y ya se les terminó.

Creo que éste es mi local favorito de la cafetería de la UABC. Cuando entré ya estaba abierto, incluso era el doble de grande pero se redujo y lo remodelaron lo que lo volvió más llamativo y comí por primera vez ahí hace como un año, es decir, tres años después de haber ingresado a la Universidad. A diferencia de las sucursales de Giuseppis como restaurante convencional, el del campus es mucho más accesible para la cartera de nosotros, los estudiantes y tiene muy buenas opciones para acabar con el hambre y terminar el día con todo. Cuando voy, a veces pido el combo de pizza y papas fritas, el sabor de la pizza es a tu elección y las papas están muy buenas, además de ser acompañado el combo con una soda. Pero mi comida predilecta de este lugar es la ciabatta de pollo al chipotle, es deliciosa; hay de otros ingredientes pero ninguna como esa.