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Feedback geven¡La tarta de Capuccino y Baileys está buenísima! ¡Felicidades!
El local es bonito y prometedor. Estaba muy lleno y las mesas están bastante juntas con lo cual casi compartes mesa con el de al lado, y tardaron bastante en tomarnos nota. Pedimos chocolate con churros y un batido oreo. El chocolate sabía un poco ácido y no me atrevi a terminarlo por si la leche estaba agria, los churros eran caseros y tenían bastante aceite, pero no estaban mal. El batido oreo tenía una pinta espectacular, pero de sabor no era nada del otro mundo. Es una pena porque el sitio era muy sugerente, pero me parece que no cuidan la calidad de los productos que utilizan. Así que me temo que no volveré.
Si te quieres tomar un buen zumo natural, sitio tranquilo y en verano. No pidas nada más que helados y zumos, lo demás es un ok sin más.
No volveré mientras estén las dueñas que están ahora, clientes de toda la vida, siempre nos han tratado bien y hemos desayunado, comido, merendado y cenado, fenomenal y ayer 22/07/2022 fue nuestra peor experiencia de cena en este sitio. Los precios los mismos, pero la calidad y la cantidad dejan mucho que desear con lo tomado tan solo dos meses antes. Primero pedimos la bebida , que cómo estamos en fiestas tuvimos que pagar nada más servirlas, detalle feo con clientes de toda la vida, nos traen la carta general, la de siempre, cuando habíamos elegido y nos van a tomar nota, nos dice el camarero que esa no vale y nos trae otra la que tienen en fiestas, con muchísimas menos cosas que la general). Éramos 6 personas y pedimos dos creps salados, que cómo ya conocíamos su tamaño y sabor, compartimos entre tres personas, concretamente el número 20 de la carta general y el 5 en la de fiestas, en las dos pone que lleva: Tres quesos, rúcula, tomate natural, jamón York,mahonesa y un toque de miel,y el 7 de la carta general que era el 3 en la de fiestas, lleva: Espinacas, roquefort, Bechamel, nueces y queso, cuando llegaron a nuestra mesa, tarde, muy tarde, resulta que el primero, no llevaba ni los tres quesos, ni nueces, ni rúcula, ni tomate natural, ni el toque de miel, llevaba algún tipo de queso cremoso, con jamón York y sabía asqueroso, totalmente incomible y el otro no tuvo mejor suerte, ni espinacas, ni nueces y encima le ponen trozos grandes de cebolla cruda, que en ninguna carta ponía que la llevaba, incomible. Pasamos a las hamburguesas, pedimos dos la Tea&chocotat, que ya la habíamos comido antes y buenísima, con una carne buenísima y con jamón serrano y sin pepinillos y nos la ponen con bacon, en lugar del jamón serrano y con pepinillos. Lo más penoso a parte de la malísima comida que nos sirvieron fue la atención y explicaciones que nos dió la encargada-dueña respondiendo a nuestras quejas que ella podía cambiar la carta si le daba la gana y claro que puede hacerlo, pero no los ingredientes que llevan los platos y que los indica en su carta, eso no puede hacerlo y le acarreará problemas y reclamaciones, además nos dice que no nos va a cobrar una de las amburguesas y en la cuenta la cobró. Cuando nos íbamos entramos a hablar con uno de los camareros que nos había atendido en otras ocasiones, con los anteriores dueños y cuando lo escuchó la encargada-dueña dijo a estos no les hagas ni caso que llevan quejándose desde que se han sentado. Jamás en todos los años que llevamos viniendo a Il Gelato, nos habían tratado tan mal en todos los aspectos. Una pena.
Todo perfecto hasta que he visto que la camarera se ha puesto a hablar delante de mi comida. Nos hemos ido, lógicamente.