Taperia De Llerena

Mucha fama, muchas expectativas, y es lo más cutre que he conocido. El servicio es pésimo, pero pésimo. No volvería nunca.

Pues vinimos recomendado por la variedad de tapas, y nos llevamos una gran decepción. El servicio, que además de tardar, deja bastante que desear. Quizás si atendieran mejor, tendrían más clientela y estarían de mejor humor, no se.

Después de una experiencia regular en la cena del día anterior en el restaurante número 1 de Tripadvisor, decidimos picar algo esta noche. Decidimos ir a este restaurante céntrico y con buena apariencia, pero al final nos dejó indiferentes. Compartimos un salteado de verduras, que estaba bien, croquetas de rabo de toro, aceptables, huevos rotos, podrían mejorar, y un pulpo a la gallega recomendado que estaba un poco duro y sin nada especial. El servicio no fue muy cercano, solo había dos mesas ocupadas durante nuestra visita. El precio era un poco alto para lo que ofrecía el lugar.

Estuvimos de visita en Llerena, un pueblo pequeño pero agradable. A la hora de comer nos decidimos por este lugar siguiendo el consejo de la chica de la oficina de turismo. El lugar es bonito y acogedor, pero la comida... Se supone que es una tapería, pero apenas tienen tapas. Vimos pasar un par de raciones y no nos pareció del todo mal. Los camareros nos dijeron que había cosas fuera de carta que eran especialidades de la casa. Pedimos el timbal de verduras con rulo de cabra y miel y el flamenquín casero con torta de La Serena. El timbal era una rodaja de tomate a la plancha, una zanahoria mal cocida, un montón de rodajas de cebolla, 3 rodajas de calabacín, dos de berenjenas, un tomate cherry pinchado en un palillo y de fondo del plato tomate frito de bote. ¡NUESTRA CARA ERA UN POEMA! A eso le llaman plato de restaurante y vale 8€! El flamenquín por dentro casi que el queso de la Serena estaba escondido porque no lo encontrábamos. Aceitoso por todas partes y relleno de trozos de carne picada, algunos incluso demasiado gordos. Sinceramente no nos gustó nada lo que nos sirvieron y no era lo que esperábamos. Una lástima.

Las raciones son buenas, pero caras, no deja de ser un bar. No tienen demasiadas cosas pero están buenas. La camarera es agradable.