Cafe Ibiza - Logroño

Que un sábado a las 17 h de la tarde después de 15 minutos de espera te digan que no hay cafetera cuando al cliente de delante le han puesto dos cafés es demasiado descarado. Si la intención del local es solo servir copas que lo digan a todos, además nuestra idea era tomar un café y luego disfrutar tomando jnas copas... pero se ve que no les apetecía. Ya sabemos de un local que no recomendar a nuestros amigos y familia! Nunca habían brillado por simpatía pero lo dd hoy ha sido demasiado.

Solo había dos camareros para todo el bar. Han tardado mucho en servirnos. Creo que para querer tener la categoría que quieren tiene que haber tres o cuatro camareros

Nos sentamos en la terraza, la camarera salio a tomar nota a la mesa de al lado( no se cuanto tiempo llevarian alli), volvio a entrar dentro , entro , salio, entro, salio asi durante 15 min para llevar diferentes pedidos, en ningun momento se digno ni a mirarnos a la cara, al menos para decir buenos dias en cuanto pueda venga , que de hecho tomar una comanda mientras se sirven pedidos ya que haces el viaje hasta la terraza es lo habitual, en su penultimo viaje para acabar de servir a la mesa de al lado volvio a sacar su libreta para tomar nueva comanda ya que se habian incorporado mas personas a la mesa y de nuevo giro la cara y se fue. Fuimos dentro a decirle que estabamos ahi, y su respuesta fue ya os he visto , volvimos a sentarnos, volvio a salir , limpio una mesa para que se sentaran otros clientes, y sacó el comandero de nuevo para cojer nota a la mesa que se le acababa de sentar, y nosotros seguiamos ahi atonitos despues de 15 min esperando, una vergüenza!!!!! Y lo dice alguien que ha trabajado de lo mismo, servicio pesimo, y encima mala educacion, aun esperamos que nos diga el buen dia. Evidentemente nos levantamos y nos fuimos!

Día soleado de invierno. 20 mesas en la terraza. 1 camarero. ... Desastroso. Después de 35 min, nos levantamos y nos fuimos. Es la segunda vez que nos pasa

Ya que estuvimos de turismo por Logroño, y no nos podíamos resistir sin tomar algo en Café Ibiza, llegamos y en la barra nos trataron bien, salimos a la terraza, nos atiende un camarero Juan Carlos, le pedimos lo que nos íbamos a tomar, luego llega con la bandeja, en vez de dejar las cosas en la mesa, nos las da en la mano, y a continuación nos tira la cuenta en la mesa desde la bandeja, amabilidad cero. Espero que nuestra próxima visita no nos pase lo mismo.