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Feedback gevenEl mejor restaurante italiano que recuerdo. Desde que entras por la puerta, sabes que no te va a dejar indiferente. A la izquierda una pequeña tienda, en la que comprar productos traídos desde Italia y con lo que componen sus platos. Sí, todos los platos están elaborados con productos traídos expresamente desde todos los puntos de Italia, incluso los vinos. La cocina, a lo largo de la barra y a la vista del cliente, con algún cocinero italiano, claro. El local amplio, de techos altos y cómodo. La carta, muy completa, de la que no sabes qué pedir porque todo te llama la atención. Yo para intentar probar de todo opté por ensalada, pasta y pizza, casi nada. Y todo espectacular, se nota hecho con cariño y ganas. Para beber un vino tinto Cottebello , muy suave y rico. Me dio la sensación de que cualquier cosa que pidas va a ser buena elección, confianza plena. También puede ser gracias al trato del personal, en todo momento pendiente de que todo estuviera al gusto. Se me olvidaba, no dejéis de pedir de postre una Panna Cotta sublime en copa que no pudo ser mejor fin de fiesta. Sinceramente, un italiano con mucho gusto, mucha calidad y cuidando todos los detalles. Por cierto, la relación calidad precio magnífica. Y un detalle que me llamo la atención, sirven comida para llevar.
Decoración muy bonita, comida también rica pero el servicio muy promedio,nada que envidiar a un bar cualquier. Te atienden con indiferencia y tienes que estar tú encima si quieres algo, incluso la cuenta. La comida está muy rica pero para lo que cobran deberían tratar mejor q sus clientes.
Restaurante italiano con ricos platos y pizzas de masa fina bastante ricas. El ambiemte es agradable y el personal amable. La comida está bastante bien, el pan de ajo está muy rico. Pedimos ensalada de tomates con queso de pastoreo y estaba bastante rica y bien presentada. Las pizzas no están mal, la masa es fina, pero no es crujiente. Como pega decir que los precios son algo caros, sobretodo para los extra tipo bebidas, cafés o el pan de ajo.
Restaurante italiano con ricos platos y pizzas de masa fina bastante ricas. El ambiemte es agradable y el personal amable. La comida está bastante bien, el pan de ajo está muy rico. Pedimos ensalada de tomates con queso de pastoreo y estaba bastante rica y bien presentada. Las pizzas no están mal, la masa es fina, pero no es crujiente. Como pega decir que los precios son algo caros, sobretodo para los extra tipo bebidas, cafés o el pan de ajo.
Los platos deliciosos (pero podrían ser un poquitín más grandes teniendo en cuenta que es cocina italiana . La atención impecable. Lo que no recomendaría para quienes conocen la verdadera sangría es pedir la de aquí porque la de aquí no lleva ni manzana, ni pera, ni jugo de naranja (y sí fanta . La burrata también deliciosa, aunque sería perfecto si la acompañasen con algo de hojas verdes.