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Feedback gevenMuy buen trato.Pedimos entrantes para compartir. Gambas al ajillo y mollejas de lechal. .De segundo chuleta.Al punto.muy buena.volveremos seguro y lo recomiendo.
Excelente pinchos para ir de tapeo, las comidas del asador inigualables. Muy buen servicio y mejor precio
Un verdadero acierto, comimos cinco personas el día de la Madre y solo cabe un resumen en cinco sílabas ma-ra-vi-llo-so. En pleno corazón de la sierra de La Culebra es un lugar perfecto para disfrutar de esa cocina auténtica, sin artificios. Pedimos ptodo para compartir: un carpaccio de salmón y uno de solomillo con virutas de queso de oveja...espectaculares, gambas al ajillo que no por comunes y redundantes en muchos sitios, da gusto comerlas tersas, hechas lo justo, como tiene que ser...después una ensalada de mezclum y queso de rulo de cabra caramelizado más que recomendable en su simple sencillez, es complicado hacer tanto con tan poco... y para terminar una chuleta de vaca madurada a la parrilla que era pura mantequilla plena de sabor (la sirven con unos platos de barro candentes por si alguien quiere calentar o pasar a su gusto tal manjar) y una carrillera de ibérico a la parrilla que nos sorprendió a parte de su sabor, por su ternura... todo regado con un Madremía, un tinto roble, de la Do. Toro que nos recomendó Olga, mil gracias por cierto, sencillamente maravilloso como acompañante. Pero no termina aquí, porque el trato fue inmejorable, no teníamos reserva y esperamos rodeados de naturalidad y buen trato en su terraza hasta última hora con gran paciencia y amabilidad por su parte...gracias Hector y Nerea, los jóvenes camarer@s que nos hicieron sentir como en casa...volveremos sin duda, pues si es importante comer bien, a buenísima relación calidad-precio, no lo es menos sentirse atendido con tanta cordialidad, cercanía y cariño. Ah por cierto, el artífice de tal cocina, al que pudimos saludar bien entrada la tarde, es Manolo, marido de Olga, un tipo que sabe lo que es el producto auténtico de calidad...gracias por las explicaciones sobre los productos de los que habíamos disfrutado...MUY RECOMENDABLE...DARÁ QUE HABLAR!!
Tomamos los pimientos y el carpaccio de ternera como entrantes y un bacalao y un solomillo de ternera como principales. Todo muy bueno. Como punto negativo, la carta no la tenían impresa y no sabíamos los precios (de hecho nos creíamos que era todo menú .
Comimos muy bien , platos muy abundantes , servicio bien. Unas vistas expectaculares. Recomendable si estas por