Reserveer nu
Feedback
Feedback gevenEn la casa de fondue, Juan Claudio Cerne, el propietario de este conocido restaurante en las montañas de la colonia Tovar, inspiró la gastronomía de esas tierras para ofrecer preparaciones tradicionales. Mallorca, a cargo del local durante años, explica que el fondue es originario de los macizos de montaña del norte de los Alpes y nace como resultado de la necesidad de alimentarse para combatir el frío con productos calóricos y nutritivos. El fundue consiste en sumergir trozos de comida en líquidos calientes, que pueden ser quesos fundidos, aceite o chocolate en caquelón, una pequeña olla de arcilla o hierro fundido. Aquiles menciona que este restaurante es una de las pocas opciones diferentes en la región y atrae a personas de otras ciudades como Caracas, Valencia e incluso Barquisimeto. Uno de los platos más solicitados es el fondue de carne bourguignonne, que se prepara colocando trozos de lomo, pollo, salchichas alemanas y verduras en platos con aceite caliente. Se puede combinar con varias salsas como cilantro, mostaza y mayonesa. Además, ofrecen fondue de queso con trozos de pan y fondue de chocolate de postre. También sirven raclette, con varios tipos de queso y fiambres regionales. El fondue no solo es una preparación calórica, sino que también genera un ambiente de camaradería al reunir a todos alrededor de la mesa.
Aquiles Mayorga cuenta que cuando comenzó a trabajar en La Casita del Fondue, empezó lavando platos en la cocina. Desconocía todo acerca de llevar el negocio y mucho menos tenía idea de cómo se manejaba aquello del fondue. Quienes le preguntan hoy al gerente general de este restaurante sobre el plato que lo caracteriza, podrían escuchar una cátedra acerca del alimento de origen suizo, pues aprendió todo lo que se necesitaba saber del mismo. El dueño de este conocido local ubicado en las montañas de La Colonia Tovar; Juan Claudio Cerne, se inspiró en la gastronomía de esas tierras para ofrecer la preparación. Mayorga, quien se ha encargado del local desde hace varios años, explica que el fondue es originario de los macizos montañosos del norte de los Alpes y nace como fruto de la necesidad de alimentarse para combatir el frío con productos calóricos y nutritivos. El aislamiento que provocaba la nieve, el pan duro y la gran producción de queso fueron los aliados para su creación. En La Casita del Fondue, comer este plato puede consistir en sumergir pequeñas piezas de alimentos en líquidos calientes, que bien pueden ser quesos derretidos, aceite o chocolate en lo que ellos llaman caquelón, una pequeña olla de barro cocido o hierro fundido. Aquiles explica que este sitio representa una de las pocas opciones diferentes de su estado y que vienen personas de otros lugares como Caracas, Valencia y hasta Barquisimeto a buscarlos. "Mucha gente llega preguntando por nuestro fondue de carne que tradicionalmente se denomina bourguignonne, aunque hace referencia a la provincia francesa de Borgoña es un plato suizo que aquí se prepara colocando pequeños trozos de lomito, pollo, variedades de salchichas alemanas y algunos vegetales en platos. El comensal coloca en el aceite caliente el trozo de su elección y luego puede combinarlo con cualquiera de las salsas que también se sirven en la mesa". De cilantro, mostaza, con base de mayonesa son algunos de los preparados que se ofrecen. El fondue de queso que es el más conocido y tradicional se sirve con pequeños pedazos de pan. El de chocolate se sirve para el postre. Éste surge después de la década del sesenta, cuando el concepto se extendió hacia la repostería. Allí se bañan las grandes fresas producidas en La Colonia Tovar y otros frutos de la zona, dulces y galletas. La Raclette es otro de los consentidos de la casa. En pequeñas planchas para freír se ofrecen diversos tipos de queso y fiambres de la región, acompañados de papas salteadas al romero y encurtidos. El fondue no solo se trata de una preparación de muchas calorías propia de los climas fríos, es también un plato que genera un ambiente de camaradería, pues todos se reúnen en la mesa en torno a un mismo producto. Fotos: Raymar Velásquez @raymarven