Fumeiro - Viveiro

La comida exquisita. Local acogedor y buen trato. El salpicón de centollo buenísimo. El rape a la brasa también. Y para finalizar la sopa de chocolate con frutos rojos excelente.

Decidimos ir a cenar. De entrada nos ofrecieron vieras. Cuando las trajeron nos sorprendió el tamaño, por lo que dijimos que eran zamburiñas o volandeiras. Nos dijeron que eran vieiras del pacífico! en Galicia! la merluza a la gallega estaba espléndida.

Fuimos a cenar al Fumeiro para probar sus platos,para empezar su sala comedor el ruido es infernal y es imposible conversar con un tono de voz normal, la acústica es muy mala. El camarero que nos atendio demostró una predisposición fuera de lo habitual incluso me daba palmaditas en la espalda al comentarnos las sugeréncias, todo cambió cuando pedimos solo 2 entrantes y 1 par de cervezas. Tienen pescados lubina,rape,martiño para cocinar a la brasa, para 2 comensales y precio por Kg, una media de 95 a 130€, eso si, no te los enseñan como hacen otros restaurantes antes de cocinar, ya te los presentan y sirven cocinados por lo que no puedes saber cuantos días tienen. Pedimos sardinas ahumadas con madera de haya ? 4 medias sardinas 2 unidades estaban bien, después una escalibada berenjena y pimiento con bacalao, esta bien. Lo peor el pan, el peor que he probado en 42 años que viajo a Galicia, por el precio podría haber sido de más calidad. Dificil volver a este restaurante sobretodo por la incomodidad y ruido y un servicio demasiado hipócrita.

Buenísimo, hemos pedido pulpo a la brasa y solomillo con foia, la textura de la carne y del pulpo indescriptibles… Es una apuesta segura si buscas sabores y buena gastronomía, ah! Y si te gusta el vino blanco y que no se te olvide pedir una botella de viasal de arman, que te recomiendan aquí. La atención de personal perfecta.

El año pasado habíamos estado en la terraza. Esta vez fuimos al comedor y nos ha encantado. Una decoración muy original y cuidada en mesa . La atención por parte del personal fue perfecta. Muy recomendable el salpicón de centolla y la carrillera. Sin embargo con el entrecot no tuvimos suerte, estaba duro aunque bueno de sabor. Al presentarnos la cuenta comprobamos que no había sido incluido en la misma. Todo un detalle. Volveremos.