Astir - Calvià

La comida, excelente en sabor, cantidad y presentación. Sin embargo, los precios son un poco elevados. Recomendaría visitar este lugar al menos una vez para probar la comida, pero no es necesariamente un destino al que regresaríamos, especialmente considerando la variedad de restaurantes de precios más asequibles en Mallorca. El servicio y el personal agradable. En cuanto al ambiente, no hay mucho que destacar, aunque las vistas son hermosas durante el día, una vez que cae la noche, no hay mucho más que disfrutar.

Por 3era vez, y 1era que opino es un placer comer aqui, por los ingredientes indispensables para que sea una experiencia sstisfactoria, calidad comida, servicio , entorno ,

Restaurante muy bonito y recomendando. Tiene una amplia terraza muy bien decorada. La atención muy buena de todos los camareros sobre todo la perdona que nos sentó en la mesa y las que no servían la comida, la encarga que es la que apunta la comanda más pendiente de otras mesas y no nos presto nada se atención... El resto de camareros de 10. Comida muy buena, nos dieron un aperitivo nada más sentarnos. El steak tartar está muy bueno. Y el pulpo también muy bien preparado. Es algo caro.

Fuimos a cenar cuatro personas con reserva, la mesa no estaba bien montada, cosa que tuve que decirle a los camareros que realizaran, en vez de ellos hacerlo por su inercia, el servicio no tenía muy claro sus roles, pedimos las bebidas, agua, dos tintos de verano que he de decir que a 10€ cada tinto de verano, de lo más caro que he visto y nestea. Sobre la comida, pedimos para compartir raviolis de guiso de calamar, muy rico, pero sólo cuatro raviolis y la ensalada de tomate con ventresca de atún, no es una ensalada que cueste 18,50€ la verdad poco aliño, poca ventresca, rico el tomate, pero poco más. Tras los entrantes vinieron los principales pollo de corral con puré de apiobola, muy jugoso y puré muy fino, pero volvemos al precio, por 28€ no. La corvina con milhojas de tumbet, pues era un buen trozo de corvina muy bien cocinada con un milhojas de berenjena que no aportan mucho volvemos a lo mismo, por 28€ el plato. Un amigo pidió la berenjena lacada que tenía buena pinta, pero no por 24€, creo que los precios van un poco en consonancia de hotel de 5* y el lugar pegado a una playa, no por la comida que ofrecen. Llegamos a los postres, tarta de queso cremosa y frutos rojos (fruta sobre la tarta), sobre un plato columna, rica, sin pretensiones para 12€, Naranja de Sóller de bizcocho aireado (esperaba un bizcocho a sifón) el bizcocho que lleva es humedo, no aireado, crema de naranja (supongo que son los cubos gelificados) y sorbete de naranja, algo acido pero es un postre fresquito, por cierto las pieles confitadas eran algo amargas, yo le daría una vuelta al postre. Pedimos el Coulant de praliné de almendra, se había pasado la cocción y no era un coulant, el helado de leche merengada si estaba bueno y poco más (no nos gustó mucho) y el chocolate en texturas, pués es chocolate, no estaba mal, pero tampoco espectacular. Por 238€ por los cuatro no merece la pena, quizas hay mejor experiencia en otros restaurantes con menú degustación por 60-65€ por persona. No repetiría. El hotel y el restaurante bonito, pero nada más. Espero que mejore para estar a la altura del hotel.

Genial ubicación en terraza con vistas preciosas. El personal muy amable, sorprendió que eran muchos para preparar el avión que me llevo había menos gente) pero no tan efectivo, creo que tienen más jefes que indios entiéndase la metáfora apache La comida busca la alta calidad pero no la encuentra. En algunos platos lo consigue. En la mayoría no. Si vienes del norte de Europa donde tu cultura gastronómica es analfabeta ej. fish and chips) este es tu restaurante. Si has nacido y comido en el mediterraneo NO.